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miércoles, 3 de diciembre de 2014

No quiero morirme sin haber sembrado ultramaratón...

El I Campeonato Argentino de Ultramaratón se llenó de corredores de punta a lo largo de todo el 2014. Asomaron a la disciplina un buen número de corredores a este ultramundo, sembramos expectativas en otros tantos, y crecimos todos. Con aciertos y con errores, con manos buenas, y con manos malas, en los buenos tiempos y en los malos tiempos.
En varios momentos del año, sentí que no cabía ninguna excusa para seguir adelante. Solo era imperioso seguir. La disciplina que tanto amo, se caía a pedazos desde hacía bastante tiempo. Asi como cada espada se me clavaba, cada espada me sacaba yo solita, inmutable, y muchas veces hasta con una sonrisa. Pero hablo de espadas traicioneras de todo tipo, no exclusivas de nuestro deporte. Espadas que te clava la vida. Pero siempre digo que Dios sabe porqué a mi. Y eso me alacanza y me sobra para continuar sin flaquear.
En el final de este 2014, puedo decir con certeza que cada paso, fue un hermoso y real triunfo, no solo en lo personal, que sería circunstancial y porque Dios lo quizo asi en estos días. Creo que hay muchas personas con fuertes convicciones y a pesar de todos los agujeros que dejan las espadas, logran sus objetivos. Fue un triunfo mucho más grande, que me trasciende.
El I Campeonato Argentino se metió ya en el corazón de los ultramaratonistas, de otros pueblos, de otros lugares lejanos. Se empieza a hablar de ultramaratón como disciplina atlética, como filosofía de vida, y no como un acto de heroísmo, donde mostrar las ampollas y los desgarros públicamente lo único que hacen es deformarla por la irresponsabilidad de unos pocos, y asi preservarla para un grupejo selecto (selecto por ellos mismos), privando de un placer, de un deporte que fortalece de pies a cabeza, que es saludable, que da la posibilidad de empezar despacito y terminar despacito, pero pleno y reconsiderando muchas cosas de nuestras propias vidas, nuestros preconceptos, nuestros temores. Descubrimos a partir del ultramaratonismo un estilo saludable de vida. Que no es poca cosa. Es todo hoy. Vivir mejor, es todo hoy. Porque en este mundo, tenemos derecho a reclamar por la salud, por los hospitales, por las ambulancias, pero también tenemos el deber de cuidar de nosotros mismos, lo más que podamos, hasta que ya no podamos más. La buena salud la provoca uno mismo, asi como la mala salud. Asique si no estás de este lado, todo lo que reclames te contradice.
Nos vimos las piernas, corredores de todos lados del país, y de otros países, pero nos vimos las piernas corredores del barrio, de la ciudad, cuando hace muy poquito dos o tres “ héroes de barro”, andábamos solos por las diagonales platenses ultramaratoneando, preparándonos para correr en otras ciudades, en otros países, sin imaginar ni por un instante todo esto.
Fueron ni más ni menos que tres carreras que se hicieron en la Ciudad de La Plata durante el 2014. Creo que no hay registro de esto en alguna otra ciudad de Argentina. Porque el esfuerzo es descomunal. Es casi como quedarse sin uno mismo. De hecho me quedé sin correr. Asi pasaron: Los 50km Antiguos Pueblos Ferroviarios, en abril Los 100km del Bosque Platense, en junio La III Edición de las 24 Horas Internacionales en La Plata.
Este I Campeonato Argentino, fue un proyecto, que nació despues de las dos primeras ediciones de las 24 Horas Internacionales en pista en La Plata, una en el 2012 y otra en el 2013. Y nada fue casualidad. Tengo para mí, un Director de Deportes, que sé que en el fondo, le gusta “padecerme” como dice él. Sabe que me convierto en un ultramoscardón y molesto y molesto, y molesto, y quiero esto, y quiero lo otro, y esto sí, y esto no, y en el fondo creo que tiene alma de ultramaratonista. Se llama Cristian Jorgensen, y agradezco infinitamente su alianza para conmigo. Este año, creo que fue el año que más me padeció, y padeció cosas que no tenía que padecer por causa del ultramaratonismo, o mejor dicho por causa de la ignorancia de otros. La ignorancia mata. Y esta vez mató literalmente. Sin embargo, Cristian, estuvo de pie, defendiendo esto mío, sabiendo que me trascendía y que lo trascendería. Fue el primero que me dio crédito cuando escuchó de mi boca, la palabra ultramartón, allá por el 2006. Como no nombrarlo y como no agradecerle.
Recuerdo en uno de esos vuelos de moscardón que me mandaba estos últimos días, le mandé ansiosa un mail, preguntándole ¿Dónde estás Cristian? (ese “dónde estas”, era un llamado desesperado de ayuda, de que ya no podía más), y a los pocos segundos mi mail tenía respuesta: “Trabajando para vos”. Ni él sabe la paz que me daba solo con esas tres palabras. Que en medio de una tormenta venga una persona y te diga que todo va a estar bien, de la manera que sea, y no solo que te lo diga, sino que cree las circunstancias para que asi suceda, que haya funcionarios asi todavía, me dan ganas de que no le digamos funcionario, porque muchas veces esa palabra se usa para desprestigiar el trabajo de una persona. Me gustaría que lo consideraramos un amigo del ultramaratonismo, y para mi, en lo personal, es un amigo de la vida, ni más ni menos. Y al ultramaratonismo no le sobran amigos, le faltan amigos. Tenemos uno. Cuidemos y celebremos eso. Hace unos días, despues de la final del I Campeonato Argentino, le mandé otro mail, para encontrarnos y agradecerle, y otras cosas mas, y me dijo: “quiero descansar de Segureeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeel unos días”. Y esas palabras, me dieron una alegría inmensa. Porque solo quiere descansar de mi unos días. Quiere decir que despues que descanse de mi, salimos a la batalla otra vez. Es un guerrero. Y yo un moscardón guerrero.
Estas ultradistancias de 24 Horas, en el 2012 y en el 2013; incluso todo el Campeonato, emergieron de una situación complicada para el ultramaratonismo nacional. Casi desapareciendo, con la desidia y la complicidad de la Asociación Argentina de Ultramaraton (AAU), con la mirada puesta en tener un lugarcito en la CADA, como solución a todos los males, y en otras ideas estúpidas. Ojalá que se vayan pronto, los que presiden esa Asociación. Les prometo agradecerles todo lo que no hicieron , pero por favor, que se vayan. Que no faltan recursos, que falta cerebro, y corazón. Que falta compromiso. Que no se cuando lo perdieron, pero desde que hago ultramaratón, lo único que hicieron fue mentir descaradamente. Empobrecieron año tras año, las pocas carreras de ultramaratón que existen en el país, y aportaron lo suyo para que desaparezcan otras tantas. Ahora sí, saben seleccionar de una manera “muy particular” ultramaratonistas para mundiales y esas cosas…y se ponen tacos altos para celebrar ultramaratón. Nosotros seguimos poniéndonos zapatillas…y algunos hasta se ponen alpargatas.
¿Cómo es posible entonces que nosotros desterrados y ya a esta altura orgullosamente autodesterrados, hayamos concretado un Campeonato contra viento y marea? Y si vamos a hablar con la verdad, un I Campeonato de Ultramaratón es lo más difícil que me tocó hacer en la vida. Y ni hablar de sostenerlo en el tiempo. Que batalla se me viene. Pero hay amor, hay ideas, hay compromiso y muchas ganas de mejorar lo hecho. No sé si está bien pedirlo pero no miren el árbol, no miren algunos errores mios, miren el bosque, miren que hicimos algo grande y que es sólido y limpio. Porque lo mío me comprometo a subsanarlo. Y no voy a tardar 10 años… Ahora les digo que inevitablemente emerjo como un líder . Un líder que emerge de situaciones caóticas. Casi siempre. Históricamente es así. Pero no vayan a creer que no me da miedo. Siempre tuve miedo. Pero amo el miedo. Amo batallarle al miedo.
Cuando hablo de líder, no es un rango de superioridad que me quiero otorgar. Es un pacto, un contrato, un compromiso con cada uno de ustedes. Es trabajo. Es mas trabajo, y es arduo trabajo. Me definió asi una situación de mierda hablando mal y pronto. Una situación que vengo soportando hace más de 7 años, a las que se plegaron creo, casi todos los ultramaratonistas en estos últimos tiempos, hartos de tanta patraña de la AAU. No sé que fue lo que les inspiró de mi, para recibir palabras como “hacé algo por favor”, “acá no se puede correr más”. Si yo me dedicaba placenteramente a ultramaratonear por otros lugares, y feliz. El hecho es que ocurrió y tomé esto como un mandato. Y ya pasaron tres años, que incluso con errores cometidos, hemos celebrado de una manera real ultramaratón, abrazados. Nos hemos dado cuenta que podemos hacer carreras de ultradistancia, y convocar más atletas a la disciplina, y contagiar. Tambien nos dimos cuenta que la “falta de recursos” es un cliché, para justificar errores tremendos. Todavía estamos sin documentos, pero hemos logrado la mirada y el apoyo también de ultramaratonistas de punta, de Organizaciones prestigiosas, de Entidades, Asosciaciones, Organismos, Empresas, Megaempresas, y seguimos sumando cada año, y haciéndonos fuertes. Será muy difícil que algún tropezón nos derrumbe. Creo que a esta altura, puedo decir con mucha satifacción que en esta tierra platense, ya no nos mueve nadie. Que desde acá vienen creciendo ramas, que se van desparramando por todo el país. Que encendimos luces. Que despertamos esperanzas dormidas. Pero también que las batallas seguirán estando, y las esperamos, porque esas batallas son las que nos hacen perdurar, y entrar en la historia del ultramaratón. Ya escribimos una nueva pagina. En el 2015, escribamos otra mayor.
(Ahora, el agradecimiento. Y el orden no le resta importancia a que todo fue posible por lo que cada uno dio de sí. Si uno hubiera faltado, esto no hubiera sido posible)

 Agradezco particularmente a cada corredor que se plantó en la línea de largada de mis ultradistancias.
 A Ricardo Cedano
 A Sebastian Cedano
 A Jessica Agudo
 Al Dr. Alberto Ricart y a todo el Instituto CESALP
 Al Dr. Vicente Ciancio
 A La Municipalidad de La Plata
 A La Dirección de Deportes de La Plata
 A Valeria Amendolara
 A Gabriel Bruera
 A la Cámara Regional de Turismo
 A Pepino Dominguez
 A la Relojería Rienzi
 Al Gimnasio Vital
 A Los Dos Vagones
 A Sergio Siadore
 A Noaflojes
 A Pro Run
 A Patagonia Run
 A Coca Cola/ Powerade
 Al Parque Ecológico Municipal
 A Julio Latini A Alberto Breinlinger
 A Laptime
 A Guillermo del Porto
 A la Fundación Máximo Rendimiento
 A Daniel Giuliani
 A Cerámica Fanelli
 A ACLHO
 Al Circulo de Atletas Veteranos Platenses.
 A INFU
 Al Diario El Dia
 Al Diario Hoy
 A la Redonda
 A  Radio La Plata
 A Info Platense
 A Alejandro Bidondo
 Al Coronel Alejandro
 A la Organización del Spartathlon
 A Julio Crispino
 A La Plata Hostel
 A Martín Perviu
 A AllSports
 A Mariana Dappello Fotografía
 A Mixsa
 A Pulver
 A Le AN
 A Pablo Arripe
 Al Grupo de Entrenamiento Sergio Siadore (Preparamos Campeones)
 Al Dr. Martin Berasategui Ilundayn
 A mis hijos, José Luis y Mariana.
 A mi Edorta querido.
 A Dios.
 Felicidades para todos, y un 2015 inspirador.
Mi total repudio, mi espalda entera, mi grito de razón, mi más sentido común me dice que escrache con nombre y apellido porque se lo tienen bien merecido, y que les sigan metiendo actos políticos y dedos en el culo, en el Centro de Educación Física Nº2 por pelotudos a:
 Javier Magliotti (Director del CEF Nº2)
 Javier Mendoza (Vicedirector del CEF Nº2)
 Leo Troncoso (Director de Educación Física de la Provincia de Buenos Aires)
 Nestro Ribet (Subsecretario de Educación)
 Nora de Lucía (Misterio de Educación y Cultura)
 Dr. Osvaldo Cid
 Dr. Benitez Franco
 Dr.Tonelli
 …y avisarles que hay cursos de perfeccionamiento…en la Universidad y en la Vida para hacer en el 2015. Nosotros, los ultramaratonistas junto con todos los deportistas de todos los rincones, nos encargamos de salvar el mundo.
Susana Segurel Directora de La Plata es Ultra Corredora Indocumentada

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